
EL SECTOR • abril/mayo 2019 ESPECIAL I 17
HuMan, un proyecto por y para las
personas
El proyecto más “humano” de cuantos desarrolla Aidimme en torno a la industria
4.0 sitúa, como Leonardo Da Vinci, al hombre como el centro de todo,
con la filosofía de que la tecnología ayude a las personas y no a la inversa.
Si teme que en el futuro los robots sustituyan a los empleados, le interesa
este artículo. HuMan es el acrónimo de HUman MANufacturing, un proyecto
englobado en el marco Horizonte 2020 de las Factorías del Futuro de la
Comisión Europea, que tiene como objetivo potenciar el I+D en la industria.
Situando al ser humano en el centro, HuMan es un proyecto de investigación
que persigue dotar a las personas de las últimas tecnologías para hacer su
jornada laboral más humana y generar un entorno de trabajo con mayor bienestar.
Con un presupuesto de alrededor de 4,5 millones y una duración de tres
años, el proyecto finaliza en septiembre de 2019. A lo largo de este tiempo
se han estado probando diversas tecnologías en el día a día de las empresas.
En concreto, HuMan contempla tres casos
de uso: Comau, en automoción; Airbus, en
aeronáutica y Royo Group en mobiliario de
baño. Además, el proyecto cuenta con multitud
de partners tecnológicos, desarrolladores
de software y universidades.
¿Qué tecnologías se están ‘testeando’ en
Royo?
Javier Martín, coordinador técnico de Proyectos
Europeos en Aidimme, nos explica
que “al tratarse de un proyecto de investigación,
es necesario probarse en la planta productiva
de la empresa, que es lo que estamos
haciendo con Royo Group. Las tecnologías
que están siendo testeadas se resumen en
tres:
• Exoesqueletos: se trata de un asistente
para el levantamiento de peso. Son parciales
y en el caso de Royo se utiliza el
pélvico. “Es como una mochila con anclajes
en las piernas que ayuda a levantar
cargas sin forzar la zona lumbar”,
dice Javier Martín. El exoesqueleto asiste
a la persona añadiendo fuerza cuando
ésta sobrepasa su capacidad. Algo
similar a cómo funcionan las bicicletas
eléctricas.
• Realidad Aumentada: se utiliza la
tecnología de la realidad aumentada
para realizar formaciones. “En el caso
de Royo se usa para la formación en
montadores. Se enseña a las personas
a montar un mueble nuevo. Gracias a
la realidad aumentada el aprendizaje es
más rápido y se puede llevar a otras factorías
de forma remota, sin necesidad
de enviar un formador”.
• Realidad virtual+aumentada: consiste
en simular un entorno de trabajo
digitalmente, lo que se conoce como
‘digital twins’. Como explica Javier
Martín, “se virtualiza un entorno para
maximizar la producción y después llevar
todas estas variables de aprendizaje
a un entorno real”.
La Inteligencia Artificial al servicio de las
personas
“Yo concibo el 4.0 no solamente como introducir
máquinas y sensores, sino que la
tecnología ayude al trabajador, y no el trabajador
a la tecnología”, opina el coordinador
de HuMan. La idea es, por tanto, que el humano
esté atendido por esas tecnologías y
su vida laboral sea así más placentera. “En la
industria manufacturera estamos hablando
de trabajos muy físicos”.
Las tres tecnologías que está testeando HUman
MANufacturing no pueden ser islas,
sino que deben estar controladas por un
sistema, que en este caso sería una Inteligencia
Artificial que esté en contacto con el
“Concibo el 4.0 no
solamente como
introducir máquinas
y sensores, sino que
la tecnología ayude
al trabajador, y no
el trabajador a la
tecnología”
trabajador y que vaya aprendiendo y conociéndole.
Este contacto se lleva a cabo mediante
‘weareables’ o “dispositivos vestibles”,
como pulseras inteligentes que monitorizan
el ritmo cardíaco, propiedades eléctricas de
la piel, o la temperatura del individuo entre
otras variables. “Esta Inteligencia Artificial
puede detectar el nivel de fatiga o estrés de
un trabajador, y recomendarle diferentes acciones:
que se ponga el exoesqueleto o que
se tome un break”, relata Martín, “incluso
podría avisar a Recursos Humanos de que
un empleado necesita una baja laboral”.
Asimismo, la tecnología también es útil para
la prevención de riesgos laborales. Según el
coordinador del proyecto, “sabemos que la
industria 4.0 va a mitigar antiguos riesgos,
pero no conocemos qué nuevos riesgos laborales
va a introducir. Por ello, tenemos
grupos de trabajo investigando precisamente
esto”.
¿Cómo perciben las empresas del sector
la implementación de estas tecnologías?
“En el sector de mueble y madera es complicado
convencerles de la necesidad de implementar
estas tecnologías, debido a que
hay mucha empresa tradicional”. No ocurre
lo mismo en automoción, por ejemplo, donde
la Industria 4.0 está muy implantada. “Es
trabajo de los institutos tecnológicos concienciarles,
y tenemos un gran equipo que
visita empresas explicándoles la necesidad
de implementar nuevas tecnologías”, afirma
Martín. “Nosotros siempre intentamos
hacerle la propuesta para participar en los
proyectos a la empresa adecuada”.
¿Y qué pasa cuando finaliza el proyecto?
En septiembre acaba HuMan y se realiza una
revisión final valorando que se han cubierto
todas las metas. Dentro del proyecto, se elabora
un plan de explotación que refleja las
posibilidades comerciales de las tecnologías.
“La Comisión Europea no quiere que esto
INDUSTRIA 4.0